9,5/10
«El físico sí importa»
Tal vez por la buena dinámica positiva de los últimos años o quizás por la seguridad que aporta una compañía como Electronic Arts, nadie dudó ni por un momento que EA tendría nuevamente algo grande entre manos para el mes de Septiembre cuando el nuevo FIFA de cada temporada saliese a la luz. Que EA ha dado con la tecla en la nueva generación (Desde FIFA 08) no es necesario mencionarlo, aunque no es menos cierto que desde FIFA 10 los cambios se han sucedido con cuentagotas. Sin embargo, ésto es lo que ocurre cuando consigues un producto cuasiperfecto, sobre el cual solo tienes que ir realizando mejoras año tras año, siguiendo la buena línea de escucha a los aficionados, a los que verdaderamente pueden juzgar el producto, por encima de beta testers o de redactores de publicaciones especializadas, EA siempre escucha a sus fans y los resultados son más que evidententes.
Para este año había algo grande entre manos, una bomba, algo que los canadienses llevaban desarrollando desde hacía 2 años, tranquilamente, paso a paso, puliendo defectos y probándolo para sacar el mayor partido posible a su nueva proeza: el nuevo motor de colisiones, el Impact Engine, que ha modificado sustancialmente la forma que teníamos de jugar a FIFA. Sin embargo, la cosa no se queda aquí, FIFA12 lleva la experiencia mucho más allá gracias a una renovación desde los cimientos del juego defensivo, consiguiendo, ahora sí, una verdadera experiencia jugable desde el delantero hasta el portero. Son muchos los cambios que esto implica, ya que ahora de nada servirá hacer la doble presión desde el centro del campo sabiendo que en un 90% de los casos íbamos a recuperar el balón. Ahora hay que medir los tiempos, calcular muchas variables, estudiar los movimientos rivales y hacer la entrada o la cobertura en el momento exacto si no queremos que el contrario pase como una exhalación a nuestro lado, dejando al equipo cojo y en una franca situación de inferioridad defensiva. Esto implica una curva de dificultad mucho más elevada, puede que la mayor de todas las entregas de la saga, ya que nos obliga a «desaprender» (como dicen en ING) para volver a construir nuestras estrategias de juego desde el principio. Sin embargo, tras varios partidos iniciales de absoluta frustración y desesperación al ver que no conseguimos recuperar ni un balón, la sensación de plenitud al hacer un corte in extremis es máxima.
Volviendo al «Impact Engine», no es algo perfecto, ya que se aprecian fallos medianamente graves (como que dos jugadores de nuestro equipo choquen incomprensiblemente y tarden una eternidad en levantarse) pero por lo general rinde a un grandísimo nivel. Por primera vez, todo es sólido: jugadores, balón, árbitros, porterías… solo se ha observado algún fenómeno extraño en las celebraciones. Esto implica que todos los jugadores tienen un gran «peso físico», por llamarlo de algún modo y su forma de aproximarse al contrario, la velocidad, la dureza de la entrada o del choque… serán factores determinantes en el éxito o fracaso de una entrada o un robo, pudiendo oscilar entre el fallo más estrepitoso, la falta más descarada o el robo más perfecto jamás visto. Pero esto también es importante en ataque, ya que no será lo mismo bregar con un tanque al estilo Llorente, una pluma como Jesús Navas o un portento como Cristiano Ronaldo. Con cada uno habrá que adoptar una estrategia distinta, haciendo el juego mucho más realista y cerebral. Si el equipo cuenta con un buen cabeceador, buscará las bandas con más ahínco y si el centro del campo es bueno, hará pases tiralineas y se adornará con filigranas. La IA rival sigue sin ser perfecta, pero ha mejorado sustancialmente. El motor de impactos afecta de forma muy realista también a las lesiones, ahora creibles y más frecuentes. De esta forma podemos tener una lesión de rodilla tras una mala entrada, un esguince al caer mal, una conmoción si chocamos fuerte… De todas formas, donde FIFA12 sigue intratable es el multijugador, tanto off como online. Los piques volverán a estar a la orden del día, máxime ahora que las labores defensivas son más complejas, el sistema de filigranas se ha mejorado y pulido y los movimientos de los jugadores con más talento (pases de rabona o de tacón, chilenas y medias voleas) pueden sacar de quicio a más de uno.
El motor gráfico sigue siendo el mismo desde el año 2008, con sutiles mejoras con respecto a la versión del año pasado. Todo luce ahora más coherente y más real, tanto a nivel de efectos de luz, el césped, las equipaciones 100% actualizadas, los estadios, los efectos del agua… Sin embargo no todo el campo es orégano y FIFA sigue adoleciendo de los mismos errores que sus antecesores: la lluvia no cae como debe, las caras siguen sin convencer (para estudiar el caso de CR7 que parece un modelo de cera…), el campo sigue dando un aspecto de vacío… Este último apartado se ha mejorado bastante ya que la ambientación ha sido un apartado en el que EA parece haber hecho mucho hincapié: Escenas introductorias mucho más trabajadas y espectaculares, videos ingame mucho más coherentes, unas gradas más vivas en cuanto a color y movimiento, unos marcadores que reflejan el tiempo de juego y el resultado (en el modo Be a Pro se aprecia perfectamente)… Una serie de mejoras que sientan muy bien al aspecto gráfico del juego.
Los modos de juego se mantienen, dado el nivel de variedad y perfección alcanzados, presentando las mayores novedades en el apartado online. En cuanto al offline, el modo carrera se ha mejorado sustancialmente, ofreciendo ahora una experiencia más cercana a Football Manager, con multitud de opciones y variantes. En este apartado poco más que decir.
Y en cuanto al apartado sonoro, pocas novedades. Banda sonora renovada, que nunca llegará al nivel de las míticas que tuvimos la oportunidad de disfrutar entre Fifa 98 y Fifa Football 2002 (mención especial para la currada banda sonora de FIFA 2000 a cargo de Robbie Williams) sin embargo suena bien y es variada. Los efectos sonoros siguen siendo de lo mejorcito, con un ambiente de estadio mejorado, un balón que suena realista, jugadores que avisan y piden pases, megafonía del estadio… Los comentarios suenan rancios ya, no es que Manolo Lama y Paco González no sean buenos, es que hay líneas de comentario que se repiten desde hace 10 años. No estaría de más volver a meterse en la sala de grabación y añadir variaciones o hacerlos desde 0. Sería de agradecer.
En definitiva, ¿EA Sports ha alcanzado la perfección? Pensando como un aficionado acérrimo, sí. Son muchas las personas que afirman: «Después de lo de este año, ya no pueden sacar nada más…». Sin embargo, echando la vista atrás y viendo el recorrido de la saga, los altibajos que ha sufrido y la capacidad de mejora que tienen, no. EA aún tiene mucho camino por recorrer. Es cierto que el sistema de juego es el más divertido y completo de la saga, pero sigue sin ser perfecto. La ambientación es un punto en el que pueden aprender mucho de Konami, verdaderos expertos en crear intros y vídeos de celebraciones alucinantes, amén de lo bien que lucen los estadios este año en PES 2012, llenos de vida y con multitud de elementos móviles en pantalla. La recreación de caras es un aspecto mejorable, echamos de menos una banda sonora a la altura de las antiguas, unos comentarios nuevos y sorprendentes… ¿El mejor FIFA entonces? Sí. ¿El juego de fútbol perfecto? Sí, hasta que salga FIFA13, con el que, a buen seguro, se nos caerán los palos del sombrajo nuevamente.